Análisis Iveco Tector Autoshift 170-300 – Parte 2

Plus en automatización. 

En esta segunda parte del análisis al Iveco Tector Autoshift nos centramos en las principales novedades: la transmisión automatizada provista por Eaton y el noble corazón de FPT que entrega 300 caballos en esta particular configuración.

 

FPT Industrial, uno de los mayores fabricantes de motores industriales a nivel global y perteneciente a Iveco Group, desarrolló el motor para equipar especialmente a esta versión de la línea Tector con transmisión automatizada. Denominado internamente como NEF 6 ID es un motor optimizado de 6.7 litros, unos 800 cc más que el posee el resto de la gama, que entrega 300 caballos de potencia máxima y un torque de 1.050 Nm, 100 Nm más que el Tector Premium 280. Entre sus características, aporta un sistema de inyección directa common rail y un turbocompresor con tecnología Waste Gate (una válvula que se encarga de regular la presión que genera la turbina). Según ingenieros de FPT Industrial, la calibración del propulsor proporciona cambios de marchas más rápidos, distribuyendo mejor el torque y la potencia, economizando el combustible y emitiendo menos contaminantes, ya que utiliza el sistema SCR (inyección de urea) para cumplir con la norma Euro 5. “Como dato no menor, el nuevo motor es compatible con combustible con gasoil de hasta 500 ppm, es decir, está apto para soportar el combustible grado dos que se utiliza en Argentina”, aseguró Marco Rangel, Presidente de FPT América Latina.

Todo el equipo fue sometido a 63 simulaciones y pruebas funcionales, rodando más de 350.000 kilómetros, ofreciendo al mercado una opción de camión que buscará aunar durabilidad y costo operacional. Las habilitaciones fueron hechas en el Campo de Pruebas de Iveco, el primero de su tipo en América Latina, y en recorridos en rutas, sierras, vías urbanas, con y sin pavimentación, que pusieron a prueba la resistencia estructural del vehículo y el desempeño de la transmisión Eaton.“Hemos hecho una comparativa con los competidores y la relación del hermanado entre caja y motor, que tiene un litro más, se ha logrado una eficiencia y rendimiento superior a lo convencional, con una ahorro de combustible más urea respecto al 280 de hasta 8%”, confió Pardal.

Respecto al tren de rodaje, cárdan y ejes sufrieron leves cambios para adaptarse a la nueva transmisión, por lo que siguen siendo los mismos en toda la gama Tector. Al mismo tiempo, se optimizó la vibración en la cabina (un ítem mejorado con la nueva generación), con soportes de suspensión fundidos y se sumó la opción de techo elevado. Con esta configuración, el conjunto mantiene un PBTC (peso bruto total combinado) de hasta 36 toneladas, y cuenta con una relación superreducida (17:1).

La novedad: caja automatizada Eaton

El Tector Autoshift, nacido en el complejo industrial que Iveco posee en Ferreyra, Córdoba, fue proyectado para maximizar la operación aumentando el confort del conductor. Esto se debe gracias a la incorporación de una transmisión que evita posibles errores en los cambios de marcha que podrían ocasionar costos adicionales en el consumo de combustible o el desgaste prematuro de los componentes.

Desarrollada por el reconocido fabricante Eaton, la caja responde al modelo MHD UltraShift Plus 9M que se conjuga a un embrague con ferodos de cerámica con el fin de otorgar una mayor vida útil. A diferencia de una transmisión automática convencional, posee dientes rectos y deja de lado los sincronizados. Para aquellos entendidos, emula a las viejas cajas manuales Fuller del propio fabricante. Solo que ésta, al ser automatizada, evita la complejidad de tener que “buscar” la marcha…

El óptimo hermanamiento de la transmisión con el motor y la electrónica va de la mano de la calibración e interacción de todos los componentes, ya que Iveco e Eaton trabajaron arduamente para alcanzar la mejor performance de la cadena cinemática, a tal punto que el proveedor de la caja permitió al fabricante de camiones modificar los parámetros de la misma con el fin de alcanzar el rendimiento deseado. “Luego de probar con transmisiones de otros fabricantes, la Eaton fue la que mejor seteada quedó y se adecuó a nuestro nuevo motor”, aseguraron por lo bajo directivos de Iveco.

Entre las principales novedades en materia de tecnología, el nuevo Tector Autoshift aporta una batería de componentes que se diferencian respecto de la competencia. Entre ellos se aprecian el pedal del acelerador optimizado, que permite al conductor encontrar fácilmente la mejor zona de torque del motor (recurso es muy valorado, especialmente en subidas); el sistema Down Hill, que engrana la décima marcha automáticamente en bajadas se esté pisando el freno o el acelerador; el Power Auto, una especia de botón “sport” que permite al motor superar la zona verde del cuenta vueltas y así llegar más rápido a la velocidad deseada; y Auto Coast, que en condiciones de descenso leve o en trecho plano mientras se disminuye la velocidad, acciona automáticamente el embrague para atravesar un obstáculo como por ejemplo una loma de burro. Luego de pasar por él, al retomar la velocidad, la marcha correcta será accionada según la electrónica de la caja.

También aporta otros recursos, como el Kick Down, que al pisar a fondo el acelerador la transmisión reduce una marcha aumentando las vueltas del motor; Skip Gear, que dependiendo de la carga, velocidad e inclinación del firme, el camión hace cambios fuera de secuencia convencional, y los conocidos asistente de partida en pendiente (funciona 4 segundos o hasta apretar el acelerador), Modo Maniobra, frenos EBS, y los control de tracción y estabilidad.

Otra de las grandes ventajas de esta transmisión es que la toma de fuerza puede colocarse tanto del lado derecho como izquierdo, facilitando la configuración que necesita cada cliente según su operación. El cambio de aceite, por su parte, se incrementó hasta los 600.000 km –respecto de una manual convencional– para productos de uso rutero, mientras que aquellas unidades destinadas al off road es de 300.000 km. A su vez, y como para cerrar este jugoso cóctel, el instrumental informa sobre el período de mantenimiento de la caja, algo que solo ofrecen el Autoshift y el Mercedes Atego 1729.